Las edades del ojo

Infanciale età dell'occhio

Al nacer, los ojos aún no están completamente desarrollados. Generalmente se pueden prescribir gafas a partir del segundo año de edad. Se recomienda realizar un control ocular profundo entre los dos y los cuatro años. En efecto, diferentes anatomías o anomalías pueden crear imágenes diferentes, que son transmitidas al cerebro. Para evitar la diplopía, el cerebro suprime la información proveniente de un ojo; esto lleva a una ambliopía (debilidad de un ojo). Actualmente los tratamientos eficaces contra la ambliopía están disponibles solo para la primera infancia, generalmente hasta los seis u ocho años de edad. Frecuentemente es suficiente una corrección apropiada. En ocasiones se indican intervenciones quirúrgicas (por ejemplo, en caso de catarata congénita, ptosis o fuerte estrabismo). Durante el desarrollo del niño, el médico oculista recomienda los tratamientos idóneos.


Adolescentes

La actividad deportiva y el deseo de una apariencia perfecta requieren frecuentemente el uso de lentes de contacto. Generalmente las lentes de contacto se toleran bien, si se respetan las condiciones de uso cotidiano; en particular, se debe prestar atención al tiempo de uso y a la higiene. Los adolescentes portadores de lentes de contacto deben ser controlados periódicamente por el oculista para evitar daños al ojo.

Entre los 10 y los 22 años de edad se produce el crecimiento más importante de nuestro cuerpo. Durante este período también puede cambiar la longitud del ojo: esto hace que frecuentemente se produzcan cambios en las correcciones, especialmente de la miopía.


Edad adulta hasta los 40 años

La fase de crecimiento del cuerpo humano termina alrededor de los 22 años. En la edad adulta también pueden producirse cambios rápidos, aunque con menos frecuencia que en la adolescencia.

Para la corrección, además de las gafas y las lentes de contacto, también se puede considerar la posibilidad de la cirugía refractiva. La intervención más común es la realizada con láser. La edad ideal para un tratamiento láser es después de la adolescencia, en condiciones estables de refracción reciente.


Edad adulta después de los 40 años

Estadísticamente, a partir de los 40 años hay una mayor incidencia de las enfermedades de los ojos. Muchas enfermedades no son advertidas inicialmente por el paciente, ya que los síntomas son casi imperceptibles y evolucionan lentamente. Por este motivo se recomienda realizar controles oftalmológicos cada 1 o 2 años, incluso para las personas sin problemas de visión.

Con el avanzar de la edad se debe prestar particular atención a ciertas patologías ―enfermedades cardiocirculatorias, reumáticas, diabetes, etc.― que requieren un estricto control oftalmológico.